Stefano Ghisolfi acaba de anunciarnos la inesperada consecución de Change, en la cueva de Flatanger (Noruega), tras meses de intensos y constantes intentos.
Es la primera repetición de la ruta equipada por el checo Adam Ondra en el año 2012, y que se convirtió en el primer 9b+ de toda la historia de la escalada.
“La batalla terminó, inesperadamente pronto, una pelea mental y física que me llevó más de un mes y dos viajes a Flatanger, terminó hoy con un baño de sangre que duró más de una hora de escalada para completar los 185 movimientos y 55m de Change, el primer 9b+ en el mundo, atornillado y escalado solo por Adam Ondra en 2012. Me siento aliviado, cansado y feliz, y disfruté de todo lo que vino con este viaje increíble (y frustrante). Gracias a Sara como siempre, a todas las personas que participaron en este proceso, y a todas las personas que hoy me animaron durante la interminable subida.
Stefano Ghisolfi

Change, el primer 9b+ de la historia
El 4 de octubre del año 2012 Adam Ondra volvía a hacer historia: encadenaba el primer 9b+ de todo el mundo.
El actual campeón del mundo y uno de los mejores escaladores de toda la historia, aprovechando las buenas condiciones de la cueva en aquellos días, finalmente logró encadenar su proyecto imposible, aquel que atravesaba gran parte de la cueva de Flatanger. El grado de 9b+ que Ondra propuso para esta increíble línea que el mismo descubrió y equipó, la sitúan en el tercer escalón de la lista de rutas más difíciles de todos los tiempos, tan solo superada por Silence y Bibliography, ambas con propuestas de 9c.
La durísima vía se compone de dos partes bien diferenciadas con un descanso en su parte intermedia. En total, ofrece 185 movimientos en más de 55 metros de escalada divididos en dos largos: el primero, de 20 metros de longitud, recibió una graduación de 9a+/b de deportiva, e incluye una sección de boulder de 8b+. Justo después viene un reposo no muy bueno para las manos y otros 25 metros de escalada de 9a.
Un total de 29 minutos de durísima escalada que incluyen un reposo de 5 minutos. Una de las vías duras más largas que existen, todo un hito en la historia de nuestro deporte.