Continuamos un día más con nuestra serie de artículos antiaburrimiento, preparados especialmente para los días en los que las noticia de escalada escasean a lo largo de todo el globo.
Y en esta ocasión queremos recordar una de las rutas más duras del planeta, Fight Club, y en especial el primer ascenso a la ya mítica vía conseguido por el escalador alemán Alexander Megos en agosto de 2016.
Establecida por el afamado Sonnie Trotter y situada en el acantilado de Ravens Crag, en Canadá, rápidamente se convirtió en la vía de escalada deportiva más dura del país. Tanto es así, que escaladores como Adam Ondra han intentado sin éxito hacerse con ella en diferentes ocasiones, habiendo tenido que abandonar su empeño por hacerse con la primera repetición, aún sin conseguir.