El centro de escalada Illoiha es único en el mundo. Una mezcla de excentricismo, locura y desconocimiento sobre lo que es y debe ser un buen rocódromo.
La marca Louis Vuitton parece estar empeñada en hacer el mayor de los ridículos a costa de la escalada. Si hace unas semanas os presentábamos sus magneseras con forma de bandolera al módico precio de 1.500 dolares, hoy os mostramos el primer rocódromo del mundo en el que no vais a poder entrenar.
Situado a las afueras de Tokyo, es una excéntrica creación de Louis Vuitton junto a Diör, y pretende ser una mezcla entre tienda y gimnasio.
Podéis visitar su página web desde el siguiente enlace.